Por fín llegó el momento de descansar! Y ha salido el sol!
Nos levantamos y fuimos a alquilar una motocicleta para recorrer toda la isla e ir a nuestro aire. ya habíamos pasado por delante la noche anterior y vimos un cartel que decía que sin carnet internacional de conducir no se alquilaba motos...y nosotros no teníamos...pero con un poco de morro y enseñando el nuevo carnet de conducir que yo me había llevado le hicimos saber al hombre que no hablaba ni papa de ingles que ese carnet era europeo "Look...look this E is from E-U-R-O-P-E"....por supuesto nada que ver con la E de España...jajajajajaja. El caso es que el hombre no se porque llegó a la conclusión que éramos Suizos, vale...no hay problema, somos suizos! Y sacó una fotocopia del año de la cascorra en la que aparecía un carnet de conducir de Suiza que decía que era válido como internacional, ya teníamos moto!
Primero fuimos a la playa de Furazamami, alquilamos unas gafas de buceo, aletas, un parasol y a snorkelar!! Diosss, que fondo marino, que corales, que pescados de colores tan enoooormes, y que pesaítos azul eléctrico tan pequeñitos...nos quedamos horas observando aquel fondo marino...despúes de 5 horas es esa playa, seguimos el camino que birdeaba la isla descubriendo rincones, calitas, miradores impresionantes, hasta que acabamos en una playa idílica solo para nosotros, allí acabamos la tarde y devolvimos las motos, pasamos por el "economato" a por unas cervecitas que disfrutamos después de una duchita en el tejado de la casa y cenamos en un chiringuito del pueblo.
Al día siguiente volvimos a alquilar la moto, buceamos, tomamos el sol, nos cayó una tormenta monumental de 5 minutos y volvimos a nuestra playa desierta antes de ver la puesta de sol en uno de los miradores de la isla, allí conocimos a una pareja española con la que compartimos cena más tarde en un restaurante del pueblo, encantadores, pasamos un rato muy agradable que acabó con la visita de nuevo al "economato" a por unos helados.
Al día siguiente ya nos despedimos de Yoshi y de vuelta a Naha, que visitamos antes de coger el vuelo de vuelta a Tokyo, donde hicimos una parada técnica antes de continuar de vuelta a España.
Un viaje por Japon
Relato de las experiencias de 21 días en Japón
viernes, 6 de agosto de 2010
jueves, 5 de agosto de 2010
Lunes 19 Julio- Zamami (Okinawa)
Hoy abandonamos great Japan y volamos hacia las islas tropicales de Japón, lamentablemente conocidas por la batalla de Okinawa de la II guerra mundial. Hoy en día es un lugar de culto para submarinistas y amantes del mar. Si bien la isla principal, Naha, es masivamente turística y con una herencia americana más que evidente (todavía hay una base militar americana), las islas secundarias están completamente inexploradas y prácticamente vírgenes.
Llegamos con el vuelo a Naha y de allí tomamos el ferry hasta nuestra pequeña isla, Zamami, de unos 400 habitantes, el trayecto resultó ser movidito por la marejada pero pasó enseguida.
Al llegar fuimos directamente a dejar las mochilas a la casa que teníamos apalabrada, el dueño, Yoshi, no estaba pero nos dejó un num de teléfono al que llamamos y acudió raudo y veloz con su motocicleta. Nos explicó como funcionaba todo y nos dijo que toda la casa era enterita para nosotros, no había más huéspedes!!
Salimos a hacer la vuelta de reconocimiento, como de costumbre, y cenamos en un pequeño local improvisado con 3 mesas que cocinaba italiano, muy bueno!!!
Llegamos con el vuelo a Naha y de allí tomamos el ferry hasta nuestra pequeña isla, Zamami, de unos 400 habitantes, el trayecto resultó ser movidito por la marejada pero pasó enseguida.
Al llegar fuimos directamente a dejar las mochilas a la casa que teníamos apalabrada, el dueño, Yoshi, no estaba pero nos dejó un num de teléfono al que llamamos y acudió raudo y veloz con su motocicleta. Nos explicó como funcionaba todo y nos dijo que toda la casa era enterita para nosotros, no había más huéspedes!!
Salimos a hacer la vuelta de reconocimiento, como de costumbre, y cenamos en un pequeño local improvisado con 3 mesas que cocinaba italiano, muy bueno!!!
Domingo 18 Julio- Hiroshima y Miyajima
Hoy es el último día completo que pasamos en el territorio principal de Japón, así que como habíamos planeado nos subimos al Shinkasen y en 1h 30m nos plantamos en Hiroshima (300 km). Nada más bajar nos encontramos con una ciudad prácticamente nueva, si hasta el momento todas las ciudades se caracterizaban por la multitud de templos, en este caso nos sorprendió la ausencia de ellos, evidentemente la razón es la devastación total qye causó la bomba atómica, las principales (y únicas) atracciones turísticas de la ciudad giran alrededor de este trágico acontecimiento.
Lo primero que hicimos fue ir a visitar el único edificio que quedó después de la explosión y el museo dedicado a la la bomba y sus consecuencias, resultó ser bastante duro en cuánto a imágenes y vídeos, pero muy interesante.
Después de visitar el museo nos dirigimos a la estación de tren para visitar Miyajima, una vez llegados a la localidad hay que subir a un ferry para visitar el famoso Tori flotante de la isla sagrada, la verdad es que impresiona el paisaje una vez se está cerca y se puede contemplar en todo su esplendor. La isla estaba llena de turistas y nos volvimos a encontrar con los bambis sagrados que campaban por toda la isla intentando comerse todo aquello que podían, como el mapa de una pobre japonesa que había dejado en el cesto de su bicicleta.
Lo primero que hicimos fue ir a visitar el único edificio que quedó después de la explosión y el museo dedicado a la la bomba y sus consecuencias, resultó ser bastante duro en cuánto a imágenes y vídeos, pero muy interesante.
Después de visitar el museo nos dirigimos a la estación de tren para visitar Miyajima, una vez llegados a la localidad hay que subir a un ferry para visitar el famoso Tori flotante de la isla sagrada, la verdad es que impresiona el paisaje una vez se está cerca y se puede contemplar en todo su esplendor. La isla estaba llena de turistas y nos volvimos a encontrar con los bambis sagrados que campaban por toda la isla intentando comerse todo aquello que podían, como el mapa de una pobre japonesa que había dejado en el cesto de su bicicleta.
Sábado 17 Julio-Fukuoka
Hoy nos vamos de Tokyo entre ruido de fiestas y toda la muchedumbre que se agolpaba en la estación de tren ansiosos de ver las carrozas engalanadas para la ocasión.
Unos de los inconvenientes de viajar sin reservas es que no siempre hay alojamiento en las fechas que se necesitas y allí donde se quiere. Esto ha sido lo que nos ha pasado organizando este día, la idea era visitar Hiroshima y Miyajima y pernoctar en Hiroshima para al día siguiente ir a Fukuoka con la única intención de coger el vuelo a Okinawa, pero gran sorpresa cuando preparando el día nos dimos cuenta que la ocupación hotelera en Hiroshima era del 100% ni una plaza libre, ni siquiera buscando alojamientos más caros! Hay!! Y ahora que!!! Hay que ver Hiroshima, no nos lo podemos perder!! Bueeeeno... que no cunda el pánico que estamos en Japón y tenemos el maravilloso Shinkansen, así que no importa dónde se duerme...si en un pis pas estás allí donde quieres en tren! Así que decidimos ir a dormir a Fukuoka y visitar Hiroshima/Miyajima en modo excursión de un día, no se necesita más....así que recorremos los 650 km que separan Kioto de Fukuoka en 3h! a esta velocidad se te planchan hasta las patas de gallo!
Nos instalamos en Fukuoka y salimos a inspeccionar la ciudad, no tiene demasiado atractivo así que acabamos en un centro comercial gigante para no pasar calor, probamos la especialidad de la región el Udón hecho con caldo de cerdo, panceta, verduras y huevo...tenia una pinta estupenda...podéis juzgar por la imagen y mi sonrisa...pero tengo que admitir que la foto fue previa a la primera cucharada...porque después de probarlo.....PUAJ!!!...parecía que estaba lamiendo a un cerdo directamente! Puedo decir dignamente que es la única comida que me sirvieron en todo el viaje que no pude soportar, es pensar en ello y se me pone la piel de gallinácea...ains....
Aunque las Gyozas estaban de vicio!
Unos de los inconvenientes de viajar sin reservas es que no siempre hay alojamiento en las fechas que se necesitas y allí donde se quiere. Esto ha sido lo que nos ha pasado organizando este día, la idea era visitar Hiroshima y Miyajima y pernoctar en Hiroshima para al día siguiente ir a Fukuoka con la única intención de coger el vuelo a Okinawa, pero gran sorpresa cuando preparando el día nos dimos cuenta que la ocupación hotelera en Hiroshima era del 100% ni una plaza libre, ni siquiera buscando alojamientos más caros! Hay!! Y ahora que!!! Hay que ver Hiroshima, no nos lo podemos perder!! Bueeeeno... que no cunda el pánico que estamos en Japón y tenemos el maravilloso Shinkansen, así que no importa dónde se duerme...si en un pis pas estás allí donde quieres en tren! Así que decidimos ir a dormir a Fukuoka y visitar Hiroshima/Miyajima en modo excursión de un día, no se necesita más....así que recorremos los 650 km que separan Kioto de Fukuoka en 3h! a esta velocidad se te planchan hasta las patas de gallo!
Nos instalamos en Fukuoka y salimos a inspeccionar la ciudad, no tiene demasiado atractivo así que acabamos en un centro comercial gigante para no pasar calor, probamos la especialidad de la región el Udón hecho con caldo de cerdo, panceta, verduras y huevo...tenia una pinta estupenda...podéis juzgar por la imagen y mi sonrisa...pero tengo que admitir que la foto fue previa a la primera cucharada...porque después de probarlo.....PUAJ!!!...parecía que estaba lamiendo a un cerdo directamente! Puedo decir dignamente que es la única comida que me sirvieron en todo el viaje que no pude soportar, es pensar en ello y se me pone la piel de gallinácea...ains....
Aunque las Gyozas estaban de vicio!
miércoles, 4 de agosto de 2010
Viernes 16 de Julio- Kyoto
Seguimos en Kyoto, las calles empiezan a llenarse de turistas japoneses, es el gran fin de semana en Japón, todos tienen fiesta y eso no suele pasar muy a menudo allí, así que el movimiento de familias de una punta a otra de Japón es impresionante. No sorprende mucho el número de Km que hacen en tren una vez has subido a un tren bala y te das cuenta que en un abrir y cerrar de ojos haces más en 300 km.
Seleccionamos las visitas a realizar en Kyoto, sólo tenemos un día para ver lo principal y hay que ser muy selectivo, también es cierto que después de dos semanas el nivel de emoción por visitar templos se reduce drásticamente, odio la expresión "visto uno, vistos todos" ya que cada uno tiene su encanto pero ya me entendéis...
Compramos en el mismo Youth hostel un pase de autobús para todo el día, de lo contrario hubieramos caminado más km que en el camino de Santiago.
Empezamos con el castillo de Kyoto, una visitas más bien floja...pero vale la pena la sala de souvenirs con Aire Acondicionado, hay que ver el calor que hacía este día!
Continuamos en el autobús hacia la atracción estrella de Kyoto, el templo dorado...aunque el trayecto fue algo incómodo para los que superan la media de altura Japonesa.. y evidentemente yo no soy ;-)
Antes de comer decidimos visitar un precioso templo zen, con su rastrillo de arena gigante, muy bonito y tranquilizador:
Volviendo al centro de la ciudad, quise pasar por el callejón de Pontocho de nuevo...necesitaba ver a una Geisha en acción! Y....voilà....una Maiko saliendo de casa y dirigiéndose a una cita con su chófer...que suerte!!
Comimos/cenamos en una hamburguesería..caímos en la necesidad de comida occidental...y continuamos caminando hasta el centro dónde se reunía toda la masa para contemplar los carromatos adornados que cada calle engalanaba para la ocasión...es como si fueran las fallas...cada carromato era una falla con su gente, pero luego nos las queman ;-)
Seleccionamos las visitas a realizar en Kyoto, sólo tenemos un día para ver lo principal y hay que ser muy selectivo, también es cierto que después de dos semanas el nivel de emoción por visitar templos se reduce drásticamente, odio la expresión "visto uno, vistos todos" ya que cada uno tiene su encanto pero ya me entendéis...
Compramos en el mismo Youth hostel un pase de autobús para todo el día, de lo contrario hubieramos caminado más km que en el camino de Santiago.
Empezamos con el castillo de Kyoto, una visitas más bien floja...pero vale la pena la sala de souvenirs con Aire Acondicionado, hay que ver el calor que hacía este día!
Continuamos en el autobús hacia la atracción estrella de Kyoto, el templo dorado...aunque el trayecto fue algo incómodo para los que superan la media de altura Japonesa.. y evidentemente yo no soy ;-)
Antes de comer decidimos visitar un precioso templo zen, con su rastrillo de arena gigante, muy bonito y tranquilizador:
Volviendo al centro de la ciudad, quise pasar por el callejón de Pontocho de nuevo...necesitaba ver a una Geisha en acción! Y....voilà....una Maiko saliendo de casa y dirigiéndose a una cita con su chófer...que suerte!!
Comimos/cenamos en una hamburguesería..caímos en la necesidad de comida occidental...y continuamos caminando hasta el centro dónde se reunía toda la masa para contemplar los carromatos adornados que cada calle engalanaba para la ocasión...es como si fueran las fallas...cada carromato era una falla con su gente, pero luego nos las queman ;-)
Jueves 15 Julio- Kyoto
Hoy nos toca movimiento de mochilas, empaquetamos y nos vamos con la música a otra parte, esta vez a Kyoto. Cogemos un Shinkansen y en 15 minutos nos plantamos en Kyoto desde Osaka....esto es una maravilla...salimos de la estación y vamos en busca de nuestro Youth hostel, muy bien situado y como siempre extremadamente limpio y tranquilo, aunque nuestras reales posaderas seguirán descansando a ras de suelo....
Dejamos los bártulos y volvemos a la estación para coger un tren dirección Kobe, nos han dicho que allí se sirve la mejor carne del mundo y no podemos quedarnos sin probarla. Al llegar a Kobe nos encontramos con una calle repleta de restaurantes dónde se cocina, previo ritual, ese manjar. Escogemos uno a "dedo" y aunque no estuvimos en los otros, a juzgar por la comida y el trato acertamos de pleno. Teníamos hambre, muuucha hambre, deseábamos empezar a comer lo más pronto posible...que ilusos..no teníamos ni idea de la calma que requiere cocinar esa carne, lo vimos en primera fila ya que nos sentaron delante de las planchas en las que el maestro cocinero hace la carne al momento, todo tiene su orden y su tiempo de cocción y a nosotros sólo se nos caía la babilla de pensar en nuestro turno, aishhh...que penita...con el mimo y el tiempo que dedicaron a hacerla y lo poquito que duró en nuestros platos! Estaba increíblemente buena...aunque hay que decir que desde luego la pagamos...
Acabados de comer salimos del restaurante y nos encontramos con una lluvia torrencial que nos obligó a ir directamente a la estación de vuelta a Kyoto, en cualquier caso Kobe no tiene más que visitar.
Al volver a Kyoto fuimos a hacer una inspección nocturna de la ciudad, no es demasiado grande y moverse a pie no resulta complicado aunque si cansado, nos dirigimos al barrio de Gion conocido por ser el lugar que alberga las antiguas casas de te y las casas de Geishas y Maikos (aprendices de Geisha), yo me moría por ver una, desde que leí "Memorias de una Geisha" me fascinó todo el mundo que rodea a estas mujeres, desde su educación siendo Maikos hasta su entrega sin condiciones a una profesión que hoy día se confunde con la de una "prostituta" y a mi entender no tiene nada, pero nada que ver. Las Geishas son mujeres de una gran cultura, tanto a nivel de política, artes, ciencias...etc, se las "contrata" por sus habilidades sociales y de conversación y para ello necesitan estar muy preparadas. Bueno...con toda mi ilusión nos fuimos al callejón Pontocho, donde aún se puede ver hoy en día a una Geisha saliendo de su casa para ir a una cita, quedan muy pocas Geishas en Japón, alrededor de 400 si no me equivoco así que es difícil encontrarse con una por casualidad, esa noche no hubo suerte en el callejón porque...estaban en las fiestas de Gion y nosotros no lo supimos hasta que nos las encontramos de cara!!!
El ambiente era festivo a más no poder, la gente lucía sus kimonos y zuecos de madera con una elegancia admirable, sólo ellas saben lo difícil que es caminar sobre unos zuecos de madera a pasitos muy pequeños para potenciar su feminidad... que sufrimiento sólo de verlas! Por cierto, Gion me pareció uno de los barrios más auténticos y con más encanto de todo Japón.
Nos tomamos una cervecita y nos Noodles para cenar y celebrar la fiesta antes de volver al hostel a descansar ;-)
Dejamos los bártulos y volvemos a la estación para coger un tren dirección Kobe, nos han dicho que allí se sirve la mejor carne del mundo y no podemos quedarnos sin probarla. Al llegar a Kobe nos encontramos con una calle repleta de restaurantes dónde se cocina, previo ritual, ese manjar. Escogemos uno a "dedo" y aunque no estuvimos en los otros, a juzgar por la comida y el trato acertamos de pleno. Teníamos hambre, muuucha hambre, deseábamos empezar a comer lo más pronto posible...que ilusos..no teníamos ni idea de la calma que requiere cocinar esa carne, lo vimos en primera fila ya que nos sentaron delante de las planchas en las que el maestro cocinero hace la carne al momento, todo tiene su orden y su tiempo de cocción y a nosotros sólo se nos caía la babilla de pensar en nuestro turno, aishhh...que penita...con el mimo y el tiempo que dedicaron a hacerla y lo poquito que duró en nuestros platos! Estaba increíblemente buena...aunque hay que decir que desde luego la pagamos...
Acabados de comer salimos del restaurante y nos encontramos con una lluvia torrencial que nos obligó a ir directamente a la estación de vuelta a Kyoto, en cualquier caso Kobe no tiene más que visitar.
Al volver a Kyoto fuimos a hacer una inspección nocturna de la ciudad, no es demasiado grande y moverse a pie no resulta complicado aunque si cansado, nos dirigimos al barrio de Gion conocido por ser el lugar que alberga las antiguas casas de te y las casas de Geishas y Maikos (aprendices de Geisha), yo me moría por ver una, desde que leí "Memorias de una Geisha" me fascinó todo el mundo que rodea a estas mujeres, desde su educación siendo Maikos hasta su entrega sin condiciones a una profesión que hoy día se confunde con la de una "prostituta" y a mi entender no tiene nada, pero nada que ver. Las Geishas son mujeres de una gran cultura, tanto a nivel de política, artes, ciencias...etc, se las "contrata" por sus habilidades sociales y de conversación y para ello necesitan estar muy preparadas. Bueno...con toda mi ilusión nos fuimos al callejón Pontocho, donde aún se puede ver hoy en día a una Geisha saliendo de su casa para ir a una cita, quedan muy pocas Geishas en Japón, alrededor de 400 si no me equivoco así que es difícil encontrarse con una por casualidad, esa noche no hubo suerte en el callejón porque...estaban en las fiestas de Gion y nosotros no lo supimos hasta que nos las encontramos de cara!!!
El ambiente era festivo a más no poder, la gente lucía sus kimonos y zuecos de madera con una elegancia admirable, sólo ellas saben lo difícil que es caminar sobre unos zuecos de madera a pasitos muy pequeños para potenciar su feminidad... que sufrimiento sólo de verlas! Por cierto, Gion me pareció uno de los barrios más auténticos y con más encanto de todo Japón.
Nos tomamos una cervecita y nos Noodles para cenar y celebrar la fiesta antes de volver al hostel a descansar ;-)
Miercoles 14 Julio-Nara
Hoy tocaba visitar Nara, una localidad nombrada Patrimonio de la humanidad de la UNESCO y primera capital de Japón. La visita es susceptible de provocar "templitis" a estas alturas del viaje, pero el conjunto arquitectónico no defrauda, aunque una generosa lluvia nos sorprende en medio de nuestra visita. Al llegar a Nara lo primero que llama la atención son los ciervos que "campan" a sus anchas en toda la localidad, se consideran animales sagrados y por ello son uno más entre los habitantes, están muy acostumbrados al visitantes y se comportan de forma tranquila y simpática.
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